La fecha de la audiencia quedó establecida luego de que el pasado 4 de diciembre una jueza le concediera casa por cárcel. Andrade fue imputado por tres delitos relacionados a supuestas irregularidades en la adición de la vía Ocaña – Gamarra, los cuales no aceptó.
El próximo jueves 1º de febrero se llevará a cabo la audiencia de acusación contra el expresidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, por las presuntas irregularidades en la adición de la vía Ocaña-Gamarra, de la cual hizo parte la multinacional brasileña Odebrecht.
Luego de varios aplazamientos, por diversos motivos, el pasado 4 de diciembre la jueza 57 de garantías de Bogotá, tras estudiar los argumentos que presentaron cada una de las partes, le concedió casa por cárcel a Andrade. La Fiscalía le imputó los delitos de interés indebido en celebración de contratos, falso testimonio y ocultamiento, alteración o destrucción de material probatorio, en septiembre de 2017.
Andrade, sin embargo, se ha defendido y ha negado en todo momento su vínculo con las maniobras irregulares por las cuales se le acusa. El pasado 24 de agosto, renunció a su cargo como presidente de la ANI porque “buscaba darle plenas garantías de imparcialidad a la justicia y no poner en riesgo la confianza que la ciudadanía tiene en la ANIy en el ambicioso programa de infraestructura que tantos esfuerzos ha requerido”.
Dentro de las pruebas que ha presentado la Fiscalía figuran chats y fotografías del celular del exsenador Otto Bula –uno de los testigos principales en este caso–, en donde dejarían ver conversaciones “indebidas” entre Andrade y el senador Bernardo Miguel Elías, con quien se vio tanto en la ANI como en el apartamento del senador.
Otro de los testimonios que ha utilizado el ente investigativo es el testimonio de Juan Sebastián Correa, secretario y enlace de Andrade en el Congreso. La Fiscalía sostiene que Andrade instruyó a Correa para borrar de los registros de la ANI los rastros de que el exsenador Elías estuvo ahí. Durante la audiencia, añadieron las declaraciones que hizo el exsenador el pasado 20 de septiembre, desde la cárcel La Picota, aseguró que prestó su apartamento varias veces para que Andrade y el entonces presidente de Odebrecht en Colombia, Eleuberto Martorelli, se reunieran.
Al término de dicha audiencia, Andrade afirmó: “En la opinión de la juez hay indicios de que haya habido interés indebido, pero no se tomó en consideración las razones por las cuales se hizo (el otrosí) y, especialmente, el hecho de que eso fue aprobado por el presidente de la República, por el vicepresidente, y por el ministro de presidencia. Esto no fue una decisión autónoma de quién está aquí. Yo tenía la función de firmar, pero tenía la función de firmarlo después de que todo el mundo debajo y encima de mí dieran su aprobación”.
La fecha de la audiencia quedó establecida luego de que el pasado 4 de diciembre una jueza le concediera casa por cárcel. Andrade fue imputado por tres delitos relacionados a supuestas irregularidades en la adición de la vía Ocaña – Gamarra, los cuales no aceptó.
El próximo jueves 1º de febrero se llevará a cabo la audiencia de acusación contra el expresidente de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), Luis Fernando Andrade, por las presuntas irregularidades en la adición de la vía Ocaña-Gamarra, de la cual hizo parte la multinacional brasileña Odebrecht.
Luego de varios aplazamientos, por diversos motivos, el pasado 4 de diciembre la jueza 57 de garantías de Bogotá, tras estudiar los argumentos que presentaron cada una de las partes, le concedió casa por cárcel a Andrade. La Fiscalía le imputó los delitos de interés indebido en celebración de contratos, falso testimonio y ocultamiento, alteración o destrucción de material probatorio, en septiembre de 2017.
Andrade, sin embargo, se ha defendido y ha negado en todo momento su vínculo con las maniobras irregulares por las cuales se le acusa. El pasado 24 de agosto, renunció a su cargo como presidente de la ANI porque “buscaba darle plenas garantías de imparcialidad a la justicia y no poner en riesgo la confianza que la ciudadanía tiene en la ANIy en el ambicioso programa de infraestructura que tantos esfuerzos ha requerido”.
Dentro de las pruebas que ha presentado la Fiscalía figuran chats y fotografías del celular del exsenador Otto Bula –uno de los testigos principales en este caso–, en donde dejarían ver conversaciones “indebidas” entre Andrade y el senador Bernardo Miguel Elías, con quien se vio tanto en la ANI como en el apartamento del senador.
Otro de los testimonios que ha utilizado el ente investigativo es el testimonio de Juan Sebastián Correa, secretario y enlace de Andrade en el Congreso. La Fiscalía sostiene que Andrade instruyó a Correa para borrar de los registros de la ANI los rastros de que el exsenador Elías estuvo ahí. Durante la audiencia, añadieron las declaraciones que hizo el exsenador el pasado 20 de septiembre, desde la cárcel La Picota, aseguró que prestó su apartamento varias veces para que Andrade y el entonces presidente de Odebrecht en Colombia, Eleuberto Martorelli, se reunieran.
Al término de dicha audiencia, Andrade afirmó: “En la opinión de la juez hay indicios de que haya habido interés indebido, pero no se tomó en consideración las razones por las cuales se hizo (el otrosí) y, especialmente, el hecho de que eso fue aprobado por el presidente de la República, por el vicepresidente, y por el ministro de presidencia. Esto no fue una decisión autónoma de quién está aquí. Yo tenía la función de firmar, pero tenía la función de firmarlo después de que todo el mundo debajo y encima de mí dieran su aprobación”.
Fuente: El Espectador
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