Los hemocentros de la ciudad hacen un llamado a los caleños para que se acerquen a donar sangre. Durante esta temporada de fin de año se requiere entre 2.700 y 3.000 unidades y solo se alcanzan a captar 2.000, según el registro del año pasado.
“Se acerca la culminación del 2017 y, como es habitual, hay más demanda de la acostumbrada en los servicios médicos, puesto que ocurren más accidentes y riñas asociadas a la ingesta de alcohol, esto último, con mayor intensidad en nuestra ciudad”, dice Carmenza Macía Mejía, directora del Banco de Sangre y Servicio Transfusional de la Fundación Valle del Lili.
La doctora Macía Mejía cuenta que reciben entre 17 y 18 donaciones al día, menos de la mitad de lo que se necesita.
El Valle tiene 5.000 donantes al mes, pero en diciembre la demanda de hemocomponentes aumenta en un 20 por ciento, es decir, se requieren 6.000 donantes para suplir las necesidades de los bancos de sangre.
“Para poder estar acorde a la necesidad, deberíamos tener 200 unidades al día en todos los hospitales para atender las emergencias que se pueden presentar”, indica la doctora docente de la Icesi.
“Si han estado en fiestas y se han tomado un par de cervezas, pueden acercarse a donar sangre 24 horas después de haber ingerido alcohol”, aclara.
El Hemocentro de la Cruz Roja Valle señala que la donación se reduce entre el 15 de diciembre y el 15 de enero, un mes en el que las necesidades de transfusión continúan, pero en el que la población en general se enfoca en sus actividades de descanso y celebración.
“La invitación es a obtener más de 3.000 donantes, podrán acercarse a la sede de la Cruz Roja en San Fernando”, dijo la coordinadora técnica del Hemocentro, Carolina Ojeda.
ELTIEMPO