Desde el Concejo insisten en militarizar a Cali

La baja percepción de seguridad que tienen los ciudadanos de Cali y el posible recorte de la Alcaldía a los recursos destinados a la seguridad para el próximo año generó una discusión en el Concejo, que terminó con la propuesta de militarizar ciertas zonas de la ciudad.

Según explicó el concejal Roberto Rodríguez, la propuesta implica un apoyo por parte del Ejército en zonas críticas de la ciudad como el jarillón del río Cauca, asentamientos de desarrollo incompleto y la zona de ladera.

“Esta semana un grupo de mujeres se manifestó frente al CAM pidiendo exactamente eso. Es prudente pensar en un acompañamiento de la Policía Militar teniendo en cuenta que la cantidad de policías que hay en Cali no dan abasto para toda la ciudad y que el presupuesto de seguridad en vez de mejorar, empeora”.

El cabildante aseguró que en el 2016 la Alcaldía dispuso para seguridad $24 mil millones; para este año $21 mil millones, y para 2018 se estiman $16 mil millones. “Es una reducción del 40 por ciento que no se justifica. Ojalá se pudiera hacer un piloto en algunos sectores para que podamos conocer los resultados”, dijo Rodríguez, señalando que la percepción de seguridad de los caleños también está comprometida según el último informe ‘Cali Cómo Vamos’.

María Ximena Román, secretaria de Seguridad y Justicia de Cali, señaló que se están haciendo esfuerzos reales para mejorar la percepción de los caleños y reiteró que no se pensará en militarizar la ciudad.

“La militarización es una medida de excepción que no se va a usar en Cali para reemplazar la autoridad civil y armada de la policía por la militar”. La funcionaria indicó además que la propuesta de presupuesto no ha sido aprobada aún y solo hasta hoy fue citada al Concejo para sustentar las modificaciones.

Según el informe de ‘Cali Cómo Vamos’, el 38% de los caleños se sienten inseguros en la ciudad y el 32% se sienten inseguros en sus barrios. Esto representa un incremento, respeto al 2016, del 12% y el 10% respectivamente. “Ya mirándolo por zonas, el nororiente de Cali tiene una mayor percepción de inseguridad (51%) y en el oriente, la menor (22%)”, dijo Marvin Mendoza, de ‘Cali Cómo Vamos’.

“Si hubiese una disminución en las fichas, la disminución sería proporcional. Hay unas ayudas que se dan, y son importantes y van en dirección a que mejoren su operatividad, pero de igual forma la Policía tiene que funcionar”, señaló Román.

Lina Osorio, coordinadora del Observatorio Cali Visible de la Universidad Javeriana, señaló que durante este año se han formulado siete proposiciones de control político a temas de seguridad, cultura de paz y Código de Policía, cuando en el 2016 se formularon tres proposiciones, siendo recurrente además la propuesta de la militarización.

“Sin embargo, no ha sido abordada con profundidad en las sesiones. Tampoco se ha notado que alguno o algunos concejales se abanderen del tema seguridad y realicen de manera sostenida (vía control político) un ejercicio de control y monitoreo a las decisiones de la Alcaldía”, afirmó. Para Osorio, la propuesta de militarización no debe tomarse a la ligera y aseguró que se debería fortalecer la relación entre Policía y comunidad.

Por su parte, Lina Martínez, directora del Observatorio de Políticas Públicas (Polis) de la Universidad Icesi, señaló que investigaciones previas indican que para muchas personas la figura del CAI de la Policía o el patrullero proveen una mayor imagen de seguridad.

“La presencia de militares no envía un mensaje de seguridad sino de situación agravada. Uno ve a un patrullero y piensa en el crimen menor, el militar tiene una simbología diferente”, explicó Martínez, quien sostuvo que el Municipio debe orientar inversiones para que las personas se sientan más protegidas.

“Más cámaras de vigilancia, más presencia de la Policía y mejores procesos para que la gente haga las denuncias de mejor manera y las pueda controlar, sabiendo qué paso con ella, eso haría mucho más que la militarización de la ciudad”, concluyó.

El profesor Hernando Llano, del Departamento de Ciencias Jurídica y Política de la Universidad Javeriana, señaló que los problemas de seguridad de Cali “obedecen fundamentalmente a una criminalidad organizada, que debe ser desvertebrada con inteligencia policiva y acción judicial, para lo cual no está preparado ningún ejército, cuya tarea central es otra: la guerra”.

ELTIEMPO